quarta-feira, 26 de fevereiro de 2014

O Respeito pelas Hierarquias



Embora cada vez mais esbatidas no contexto laboral, dependendo da dimensão da empresa em que se inserem, as hierarquias profissionais continuam a existir e a desempenhar o seu papel no progresso organizacional. Que comportamentos adotar em prol de um salutar ambiente de trabalho? É esta a reflexão central da publicação deste mês da nossa especialista em Protocolo, Margarita Murillo Garcia, da empresa espanhola Galicia Protocolo.

RESPETO AL JEFE/A. A LOS SUPERIORES EN GENERAL


En el ámbito social, el de las relaciones interpersonales, en concreto, dentro de “la buena educación” nadie se cuestiona la premisa que exige el respeto a los mayores. Pero ¿qué sucede en el ámbito laboral en relación a los puestos superiores? (no siempre los mayores de edad).
Es cierto que hay empresas o instituciones que colocan en puestos de responsabilidad a personas que no tienen méritos suficientes o no tienen un perfil adecuado para asumir la importante responsabilidad de tener a personal a cargo, lo cual supone sembrar el germen del mal ambiente dentro del ámbito laboral. Pero también es cierto que, en muchas ocasiones, el comportamiento inadecuado parte de algún miembro de la plantilla. En cualquiera de los dos casos: “la guerra está declarada” y, como siempre, en perjuicio del ambiente laboral y la imagen de la empresa o institución.
Si un jefe/a debe ser respetuoso con las personas a las que tiene a cargo, no es menos cierto que, a la inversa la obligación es la misma.
Aquí hoy solo queremos reflexionar sobre tres comportamientos especialmente tóxicos de miembros de una plantilla frente a sus superiores:
·       No atender a las instrucciones realizadas por un superior. Ante este comportamiento sólo podemos decir que el trabajo tiene que hacerse, es decir, alguien tiene que hacerlo. No es un castigo (no debe serlo, partimos de esa base). Un buen jefe/a debe saber delegar.

·       Cuestionar públicamente al superior jerárquico. Un comportamiento muy grave especialmente cuando se deja en cuestión al responsable delante de un cliente o su propio superior jerárquico. Todo el mundo se equivoca y comete errores, cualquiera puede tomar una mala decisión, pero ¿es necesario reflejar eso ante el cliente, el proveedor o ante el jefe/a supremo/a “para que conste” y demostrar los listos/as que somos y lo incompetente que es nuestro/a superior jerárquica? Cuando esto ocurre, entendemos que existe un gravísimo problema de fondo que no se debe tomar a la ligera. No se trata de callarse, de tapar los errores; se trata de hablar, trabajar en equipo.

·       Saltarse al jefe/a, contactando directamente con el cliente, proveedor o, incluso, al máximo/a superior. (Aquí se nos viene a la cabeza la frase popular “hacer la cama”). Poco más queremos añadir respecto a esta tan desagradable e indeseable situación, salvo que es una forma de subir puestos desprovista de toda ética personal y profesional. Cualquier miembro de plantilla, del equipo, debe respetar a su responsable, ofreciéndole toda la información, todos los datos. Una vez más, saber trabajar en equipo.
Años de experiencia laboral nos han permitido presenciar, en numerosas ocasiones, estos comportamientos así como sus negativas consecuencias, comenzando por la quiebra de las relaciones y tensión del ambiente laboral. Entendemos que la clave es, como en la mayor parte de las relaciones interpersonales, el RESPETO y poner el foco en el bien común, en este caso de la empresa/institución, dejando a un lado el humano pero peligroso ego exacerbado.


Sem comentários:

Enviar um comentário